Viendo la recreación de los esgrimistas del video puesto en el hilo de los Tercios, quien hace de orador cuenta al final como hay constancia de la existencia de mujeres espadachinas en la época. Así que propongo un nuevo hilo que seguro a mas de uno en este país le llegaría a resultar sorprendente:
Mujeres en pie de guerra. La orden del hacha
La idea es que el tema se pueda abordar de forma ámplia. Principalmente desde la evocación a aquellas mujeres que hubiesen destacado a causa de alguna acción belicosa, pero como las batallas no solo se libran con la espada en la mano, dándose estos casos inmersos en un mundo principalmente de hombres, también se podría extender a cualquiera otras acciones que las hubiesen hecho destacar a fuerza de arrojo y ovarios
¿Qué fue la Orden del Hacha?
Cita:
Orden de las Damas de Tortosa
También llamada la orden del Hacha fue fundada en 1149 por Ramón Berenguer IV, conde de Barcelona, como tributo a las mujeres que unieron sus esfuerzos a las tropas que la defendían y contribuyeron a la conquista de la ciudad de Tortosa a manos de los musulmanes.
Las mujeres que a ella pertenecían gozaban de muchos privilegios, libre de impuestos y el que los caballeros les cediesen la preeminencia en los actos públicos. A esta orden sólo podían acceder las descendientes de las mujeres defensoras.
http://laordendelhacha.com/ _________________ En un insólito abismo abierto en las nubes vi Aldebarán y las Hiadas y todo me sugería la noche. El lince, la lechuza, el hombre de la antorcha. No había oscuridad y yo veía las estrellas ¿De que atroz sortilegio era víctima?
Registrado: Jan 27, 2006 Mensajes: 1935 Ubicación: Avilés
Publicado: Tue Jan 10, 2017 12:11 amAsunto:
Las mujeres Caballero de Palencia
Cita:
Hoy queremos dar homenaje a la mujer palentina contando como curiosidad su leyenda.
En el año 1386 reinando en Castilla Juan I, como consecuencia de la batalla de Aljubarrota, Castilla quedó desguarnecida, lo que el Duque de Lancaster, consideró una situación óptima, para revindicar la corona de Castilla de la cual se consideraba pretendiente legítimo. Desembarco en Galicia y empezó su incursión hacia el núcleo de Castilla. Tomó sucesivamente, La Coruña, Santiago, Orense, y entabló batallas victoriosas en diversos frentes de Castilla, hasta que llegó a Palencia, a primeros de junio de 1387, donde fue derrotado por las mujeres de la ciudad (en ausencia de los hombres), lo cual refrenó las pretensiones dinásticas del Duque de Lancaster.
Juan I para premiar dicha gesta, dio el privilegio perpetuo a las mujeres de Palencia de ser caballeros de honor y portar la banda de oro que las iguala a los caballeros.
El rey Juan I concedió el privilegio a las mujeres de Palencia, de poder llevar la banda dorada que, hasta entonces, sólo ostentaban los caballeros. El honor fue debido a la defensa que de la ciudad realizaron las mujeres en mayo de 1388 contra el ejército inglés del Duque de Lancaster. Hoy en día es un distintivo que únicamente pueden llevar las mujeres palentinas.
Como recuerdo de la valentía de la mujer palentina, además de la banda de oro también guarmanos una mesa de nogal, rematada con una gran placa de mármol, en la que se recuerda el privilegio otorgado por el rey Juan I a las mujeres de Palencia por haberse enfrentado a los asediadores ingleses cuando los hombres palentinos se hallaban ausentes, enrolados en las mesnadas reales. En la inscripción se recoge que a las mujeres de Palencia se les concedió el honor de poder adornar sus tocas con los colores oro y rojo, un privilegio sólo reservado a los caballeros.
https://turismodepalencia.wordpress.com/2013/08/02/heroinas-palentinas/ _________________ En un insólito abismo abierto en las nubes vi Aldebarán y las Hiadas y todo me sugería la noche. El lince, la lechuza, el hombre de la antorcha. No había oscuridad y yo veía las estrellas ¿De que atroz sortilegio era víctima?
Ultima edición por YofuiIcaro el Tue Jan 10, 2017 12:25 am, editado 1 vez
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Publicado: Tue Jan 10, 2017 12:21 amAsunto:
María Estrada. En la conquista de México.
Cita:
“No es bien, señor capitán, que mujeres dejen a sus maridos yendo a la guerra; donde ellos murieron moriremos y es razón que los indios entiendan que somos tan valientes los españoles que hasta las mujeres saben pelear”
Cita:
"Y así mismo lo hizo la propia el día de la memorable batalla de Otumba, a caballo, con una lanza en las manos, que era cosa increíble el ánimo varonil, digno por cierto de eterna fama e inmortal memoria."
http://www.mcnbiografias.com/app-bio/do/show?key=estrada-maria _________________ En un insólito abismo abierto en las nubes vi Aldebarán y las Hiadas y todo me sugería la noche. El lince, la lechuza, el hombre de la antorcha. No había oscuridad y yo veía las estrellas ¿De que atroz sortilegio era víctima?
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Publicado: Tue Oct 03, 2017 7:11 amAsunto:
Catalina de Erauso
Catalina Erauso y Pérez Galarraga (San Sebastián, Guipúzcoa, España, 1585 - Cotaxtla, cerca de Orizaba, Nueva España, 1650?), popularmente conocida como la Monja Alférez, fue una militar, monja y escritora. Uno de los personajes más legendarios y controvertidos del Siglo de Oro español. Durante casi 400 años, el mito de la prodigiosa Monja Alférez ha permanecido vivo a través de estudios históricos, relatos biográficos, novelas, películas y cómics.
Hay un pequeño error en la consideración de Isabel Barreto. En realidad no fue Almirante, ya que Almirante era un título, habría sido mas bién gobernanta de barco y descubridora.
La verdad es que he vuelto a ver la conferencia de Maria Elvira no me queda claro si Isabel Barreto pudo haber sido nombrada Almirante en alta mar o no. _________________ En un insólito abismo abierto en las nubes vi Aldebarán y las Hiadas y todo me sugería la noche. El lince, la lechuza, el hombre de la antorcha. No había oscuridad y yo veía las estrellas ¿De que atroz sortilegio era víctima?
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Publicado: Sat Jul 28, 2018 10:12 amAsunto:
el retrato que has puesto está equivocado, es de Sor Juana Inés de la Cruz cuando era adolescente, de hecho si lo hubieses puesto completo verías que tiene un libro en la mano. _________________ El Contador de Historias
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Publicado: Sun Jul 29, 2018 8:37 amAsunto:
Espero haber acertado ahora
No Fueron Solos https://www.youtube.com/watch?v=1p9fA3Vw8KI _________________ En un insólito abismo abierto en las nubes vi Aldebarán y las Hiadas y todo me sugería la noche. El lince, la lechuza, el hombre de la antorcha. No había oscuridad y yo veía las estrellas ¿De que atroz sortilegio era víctima?
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Publicado: Tue Jan 01, 2019 11:40 pmAsunto:
ISABEL DE GUEVARA
Cita:
A la muy alta y muy poderosa señora la Prinçesa Doña Joana, Gouernadora de los reynos d’ España, etc. -En su Consejo de Yndias.
Muy alta y muy poderosa señora:
A esta probinçia del Río de la Plata, con el primer gouernador della, Don Pedro de Mendoça, avemos venido çiertas mugeres, entre las cuales a querido mi ventura que fuese yo la vna; y como la armada llegase al puerto de Buenos Ayres, con mill e quinientos hombres, y les faltase el bastimento, fué tamaña la hambre, que, á cabo de tres meses, murieran los mill; esta hambre fué tamaña, que ni la de Xerusalen se le puede ygualar, ni con otra nenguna se puede conparar. Vinieron los hombres en tanta flaqueza, que todos los travajos cargavan de las pobres mugeres, ansi en lavarles las ropas, como en curarles, hazerles de comer lo poco que tenian, alimpiarlos, hazer sentinela, rondar los fuegos, armar las vallestas, quando algunas vezes los yndios les venien a dar guerra, hasta cometer á poner fuego en los versos, y á levantar los soldados, los questavan para ello, dar arma por el canpo á bozes, sargenteando y poniendo en orden los soldados; porque en este tienpo, como las mugeres nos sustentamos con poca comida, no aviamos caydo en tanta flaqueza como los hombres. Bien creera Vuestra Alteza que fué tanta la soliçitud que tuvieron, que, si no fuera por ellas, todos fueran acabados; y si no fuera por la honrra de los hombres, muchas mas cosas escriviera con verdad y los diera a hellos por testigos. Esta relación bien creo que la escribiran á Vuestra Alteza mas largamente, y por eso sesaré.
Pasada esta peligrosa turbunada determinaron subir rio arriba, asi, flacos como estavan y en entrada de ynvierno, en dos vergantines, los pocos que quedaron viuos, y las fatigadas mugeres los curavan y los miravan y les guisauban la comida, trayendo la leña á cuestas de fuera del navio, y animandolos con palabras varoniles, que no se dexasen morir, que presto darian en tierra de comida, metiendolos a cuestas en los vergantines, con tanto amor como si fueran sus propios hijos. Y como llegamos a vna generaçion de yndios que se llaman tinbues, señores de mucho pescado, de nuevo los serviamos en buscarles diversos modos de guisados, porque no les diese en rostro el pescado, á cabsa que lo comian sin pan y estavan muy flacos.
Despues, determinaron subir el Parana arriba, en demanda de bastimento, en el qual viaje, pasaron tanto trabajo las desdichadas mugeres, que milagrosamente quiso Dios que biviesen por ver que hen ellas estava la vida dellos; porque todos los serviçios del navio los tomavan hellas tan a pechos, que se tenia por afrentada la que menos hazia que otra, serviendo de marear la vela y gouernar el navio y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podia bogar y esgotar el navio, y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen, que para los hombres heran los trabajos: verdad es, que á estas cosas hellas no eran apremiadas, ni las hazian de obligaçión ni las obligaua, si solamente la caridad. Ansi llegaron á esta çiudad de la Asunçion, que avnque agora esta muy fertil de bastimentos, entonçes estaua dellos muy neçesitada, que fué neçesario que las mugeres boluiesen de nuevo a sus trabajos, haciendo rosas con sus propias manos, rosando y carpiendo y senbrando y recogendo el bastimento sin ayuda de nadie, hasta tanto que los soldados guareçieron de sus flaquezas y començaron á señorear la tierra y alquerir yndios y yndias de su serviçio, hasta ponerse en el estado en que agora esta la tierra.
E querido escrevir esto y traer á la memoria de Vuestra Alteza, para hazerle saber la yngratitud que conmigo se a vsado en esta tierra, porque al presente se repartió por la mayor parte de los que ay en ella, ansi de los antiguos como de los modernos, sin que de mí y de mis trabajos se tuviese nenguna memoria, y me dexaron de fuera, sin me dar yndio ni nengun genero de serviçio. Mucho me quisiera hallar libre, para me yr a presentar delante de Vuestra Alteza con los serviçios que a Su Magestad e hecho y los agravios que agora se me hazen; mas no esta en mi mano, porquestoy casada con vn cauallero de Sevilla, que se llama Pedro d’Esquiuel, que, por servir á Su Magestad, a sido cabsa que mis trabajos quedasen tan oluidados y se me renovasen de nuevo, porque tres vezes le saqué el cuchillo de la garganta, como allá Vuestra Alteza sabrá. A quien suplico mande me sea dado mi repartimiento perpétuo, y en gratificaçión de mis serviçios mande que sea proveydo mi marido de algun cargo, conforme a la calidad de su persona; pues él, de su parte, por sus serviçios lo merese. Nuestro Señor acreçiente su Real vida y estado por mui largos años.
Desta çibdad de la Asunçion y de jullio 2, 1556 años.
Serbidora de Vuestra Alteza que sus Reales manos besa.
Doña Isabel quizá exagerase un poquito pero no mucho. Estamos en el que se considera el primer intento de fundación de Buenos aires, que como vemos fracasa. El hambre y el enfrentamiento con los indígenas conduce al desastre. Al cavo de los años nuestra heroína reclama lo que de ley considera que le pertenece. Este sería, parece ser, su fracaso personal. Parece claro que nunca le fue concedido lo pedido, lo que no lo está tanto es si siquiera la carta pudo llegar a su destino. Enfrentamientos internos entre los conquistadores sinamitaron sus esperanzas.
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Publicado: Thu Mar 21, 2019 11:21 pmAsunto:
Ana María de Soto. Una mujer en la Infantería de Marina del XVIII
Cita:
Con esta fecha digo al Comandante General de la Escuadra del Océano Don José de Mazarredo: Habiendo dado cuenta al Rey de cuanto V.E. expresa en su carta del 13 del presente mes que trata sobre lo acontecido con Ana María de Soto que ha servido bajo el nombre de Antonio de Soto, soldado de la 6ª Compañía del 11º Batallón de Marina; y enterado S.M. de la heroicidad de esta mujer, la acrisolada conducta y singulares costumbres con que se ha comportado durante el tiempo de sus apreciables servicios, ha venido en concederle dos reales de vellón diarios por vía de pensión, y al mismo tiempo, que en los trajes propios de su sexo pueda usar los colores del uniforme de marina como distintivo militar… y también S.M. ha venido en concederle el grado de sargento primero por haber servido en los Batallones de Marina como soldado voluntario durante cinco años y cuatro meses, para que pueda atender a sus padres(…) San Lorenzo a 4 de Diciembre de 1798. Firmado Juan de Lángara
http://www.defensa.gob.es/gl/Galerias/documentacion/revistas/2010/10-259.pdf _________________ En un insólito abismo abierto en las nubes vi Aldebarán y las Hiadas y todo me sugería la noche. El lince, la lechuza, el hombre de la antorcha. No había oscuridad y yo veía las estrellas ¿De que atroz sortilegio era víctima?
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Publicado: Thu Aug 15, 2019 6:12 amAsunto:
Iván Vélez sobre María de Estrada.
Cita:
"En todo tiempo ha habido mujeres de varonil ánimo y consejo". Así se refirió Francisco Cervantes de Salazar al colectivo al que pertenecía María de Estrada. En su obra Crónica de la Nueva España, su descripción, la calidad y temple de ella, la propiedad y naturaleza de los indios, del siglo XVI, el primer catedrático de Retórica de la Real y Pontificia Universidad de México dejó escritas las palabras que María de Estrada pronunció después del desastre de la Noche Triste, jornada que condujo a cinco "mujeres de Castilla" a la piedra sacrificial del Templo Mayor.
Finalizado el repliegue en Tlaxcala, mientras se preparaba la ofensiva final para la toma de Tenochtitlán, ante la intención de que las féminas se quedasen en la ciudad aliada, aquella a la que Bernal Díaz del Castillo se refirió como a una "buena y honrada mujer", dijo a Hernán Cortés: "No es bien, señor capitán, que mujeres españolas dexen a sus maridos yendo a la guerra; donde ellos murieren moriremos nosotras, y es razón que los indios entiendan que son tan valientes los españoles que hasta sus mujeres saben pelear, y queremos, pues para la cura de nuestros maridos y de los demás somos necesarias, tener parte en tan buenos trabajos, para ganar algún renombre como los demás soldados".
María de Estrada, de cuyo lugar de nacimiento no tenemos constancia, al margen de que el padre Feijoo, en su discurso Defensa de las mujeres del siglo XVI, dijera que "el apellido persuade que era asturiana", era hermana del conquistador Francisco de Estrada, establecido en el Nuevo Mundo desde 1509, año en el que probablemente llegó María. Las primeras referencias caribeñas la sitúan en Cuba. Allí cayó en poder de los indios taínos durante los combates que tuvieron lugar en Matanzas. Una vez liberada, se casó con el sevillano Pedro Sánchez Farfán en la villa de La Trinidad. Probablemente pasó a la Nueva España en abril de 1520, a bordo de la flota capitaneada por Pánfilo de Narváez, para encontrarse con su marido, que se había integrado en la hueste cortesiana. Sánchez Farfán fue quien capturó a Narváez durante la operación que Cortés desplegó para neutralizar al enviado por Diego Velázquez de Cuéllar.
El capitán Bernal Díaz del Castillo la cita por su nombre en su Historia verdadera de la conquista de la Nueva España en 1632, cuando hace el balance de los supervivientes de la Noche Triste. El de Medina del Campo escribió: "Pues olvidado me he de escribir el contento que recibimos de ver viva a nuestra doña Marina y a doña Luisa, la hija de Xicotenga, que las escaparon en las puentes unos tascaltecas, y también una mujer que se decía María de Estrada, que no teníamos otra mujer de Castilla en México sino aquélla".
El cronista Diego Muñoz Camargo, hijo de español e india, añadió detalles de las acciones de aquella mujer. En su Historia de Tlaxcala de 1802, dejó este apunte: "En esta tan temeraria llamada la noche triste [...] se mostró valerosamente una señora llamada María de Estrada, haciendo maravillosos y hazañeros hechos con una espada y una rodela en las manos, peleando valerosamente con tanta furia y ánimo, que excedía al esfuerzo de cualquier varón, por esforzado y animoso que fuera, que a los propios nuestros ponía espanto". En su Monarquía indiana de 1615, el franciscano fray Juan de Torquemada, prácticamente calcó aquel belicoso retrato: "Mostróse muy valerosa en este aprieto y conflicto María de Estrada, la cual con una espada y una rodela en las manos hizo hechos maravillosos, y se entraba por los enemigos con tanto coraje y ánimo, como si fuera uno de los más valientes hombres del mundo, olvidada de que era mujer, y revestida del valor que en caso semejante suelen tener los hombres de valor, y honra. Y fueron tantas las maravillas y cosas que hizo, que puso en espanto y asombro a cuantos la miraban".
Doce años después de la caída del imperio mexica, Pedro Sánchez Farfán falleció, circunstancia que dejó huella en la correspondencia de Hernán Cortés, siempre favorable a aquel soldado y, por ende, a su esposa.
La lealtad era recíproca, pues Sánchez Farfán se negó a firmar las acusaciones que sobre Cortés hizo la primera Audiencia de la Ciudad de México, negativa que acarreó su desposesión del cargo de regidor. En una carta escrita el 18 de marzo de 1533 en el Puerto de Santiago, bañado por la Mar del Sur, el de Medellín informó a su primo, el licenciado Francisco Núñez, encargado de sus asuntos en la Corte, de aquella muerte, hecho que pidió que fuera conocido por la emperatriz y los miembros del Consejo. En la misiva, instó a su pariente a que velara por los intereses de la viuda. En concreto, por la conservación de los pueblos de Tetela y Xilotem.
La pluma de Cortés, que da cuenta de la extinción de aquellas encomiendas vinculadas a su círculo más cercano, delata el afecto que tenía por la pareja: "Pero Sánchez Farfán era uno de los mayores amigos que yo en estas partes tenía y que perdí un deudo muy cercano y a su mujer soy en mucho amigo y, para las cosas que le tocaren, tengo de hacer cuenta que en lugar de su marido porque me sirvió muchos días y la tengo en lugar de hermana y digo esto para que sepáis en cuanto terné todo lo que por ella hiciéredes y que así lo digáis a todos esos señores. Bien creo que luego como murió su marido los oidores le quitarían los pueblos y los pornían en corregimiento porque así lo han hecho con todos los que mueren, a lo menos con aquellos que ellos piensan que son mis amigos, y recibe mucho daño su mujer, así por quitalle su principal mantenimiento como porque en el uno de ellos tenía la granjería de su hacienda. Pidos por merced que este negocio prevenga al más principal que yo tenga y me procuréis y enviéis el buen despacho del con toda brevedad porque lo terné en mucho".
Tiempo después, la viuda se casó en segundas nupcias con uno de los 33 fundadores de Puebla: el sevillano Alonso Martín Partidor, que ya había perdido a su primera esposa, con la que tuvo numerosos hijos. Como la de tantos otros, la figura de María de Estrada se diluyó envuelta en pleitos que trataban de retener los dividendos que, ganados con la espada, se negaban con la pluma.
Más allá de las dudas que todavía perduran sobre su verdadera identidad y biografía, María Bellido representa a todas aquellas mujeres que arriesgaron su vida para curar heridas, llevar agua e insuflar ánimos a los combatientes españoles en aquellas duras y ardientes jornadas de mediados de julio de 1808 en las cercanías de Bailén. De hecho, el escudo de Bailén incorporó un cántaro roto a su escudo municipal en recuerdo y homenaje a todas ellas.
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